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20 de diciembre de 2012

detergente Fairy y Como aprovecharse De las Percepciones

El lavavajillas Fairy es un producto conocido por todos y con un doble posicionamiento claro y efectivo. Por un lado se trata de un producto no más caro, sino que cuesta más, pero con una duración superior a cualquier otro, lo que a la larga le convierte es más económico. Por otro es el más eficaz para eliminar la grasa.

El paso de lavavajillas digamos manual al usado en un friegaplatos no debería plantear mayor problema ni para la compañía ni para que los consumidores lo admitan como algo natural sin que afecte al posicionamiento inicial del producto.

El problema puede aparecer si se pretende utilizar el branding de Fairy, la posición firme que ocupa en la mente de los clientes como eficaz a la hora de limpiar vajillas, para realizar una extensión categoría y presentarlo como detergente.

Para hacerse una idea de lo que digo es como si Ariel o Colón o Norit lanzaran al mercado su versión lavavajillas. De la misma forma que limpian manchas en la ropa podrían hacerlo en los platos y vasos. En el fondo no dejan de ser limpiadores.


Sería un error.


El paso de lavavajillas Fairy a detergente Fairy se podría considerar de la misma manera. Una cosa es limpiar grasa otra limpiar diferentes tipo de manchas que no siempre tienen que ver con la grasa. Incluso un co-branding Ariel-Fairy como detergente, uno para manchas y otro para luchar contra la grasa, podría parecer más lógico.

Sin embargo desde Procter & Gamble, que es la marca propietaria de Fairy, han hecho algo que, desde mi punto de vista puede facilitar la siempre desaconseable extensión de línea,  de categoría etc. Me refiero a que han tenido en cuenta las percepciones que existen en la mente de un buen número de clientes de Fairy lavavajillas. Estos clientes a los que me refiero, suelen exender un poco de producto sobre aquellas manchas que consideran "difíciles" 

En la campaña para el lanzamiento de detergente Fairy han utilizado esa costumbre. Es una forma de llegar a ese tipo de consumidores, que posiblemente prueben el nuevo detergente. Para ello lo que esas percepciones pueden esperar es que se trate de un detergente líquido, que seguramente extederan alguna gota sobre esas manchas antes mencionadas. Desde mi punto de vista, el detergente el polvo no facilitaría el lanzamiento de este producto.


Estar al tanto de las percepciones ha facilitado a la compañía el lanzamiento de un producto de éxito en una categoría, como son los lavavajillas, en otra como son los detergentes. Sin embargo, en mi opinión, creo que el posicionamiento de Fairy está tan directamente relacionado con la "grasa" que no sé si será posible extender las "habilidades" del detegerte Fairy hacia la eliminación de otro tipo de manchas.


Una cosa es utilizar puntualmente un producto para una necesidad concreta y otra utlizarlo para todo tipo de situaciones con las que, hasta ese momento, no se le había relacionado. 

Como ejemplo extremo, la pasta de dientes tiene multitud de usos aparte del suyo habitual. Quizá el más conocido sea que alivia las picaduras y leves quemaduras. También es eficaz para eliminar olores como ajo, cebolla, pescado de las manos. Si lo elimina en la boca, se podría entender que también fuera eficaz, que lo es, en las manos. La gente utiliza puntualmente estos remedios, sin embargo ¿comprarían un crema Signal manos o Binaca Manos o Colgate manos?

Como resumen, entendiendo que la compañía quería introducirse con la marca Fairy en la categoría de detergentes, creo que a pesar de no ser lo más recomendable, al menos han optado por una via que puede ayudar en el inicio en esa nueva categoría.





13 de diciembre de 2012

Hacer lo Contrario puede Ser una Buena forma De diferenciarse





Lo habitual que buscan las marcas en las redes sociales, más concretamente en Facebook es conseguir cuantos más clics, mejor. Podríamos decir que prima más la cantidad que la calidad. Como si el numeroso grupo de seguidores fuera sinónimo de fidelidad en ventas o en recomendación de su producto.

La guerra está  en saber qué marca cuenta con más seguidores, qué famoso cuenta en su página con mayor número de fans. Cierto que conseguir un alto nivel de seguidores es el  objetivo de cualquier marca que disponga de una página en esta red social. Pero no menos cierto es que habría que buscar una fórmula que permitiera vislumbrar cuáles son realmente los más fieles e importantes entre todos aquellos que han pulsado el botón de me gusta convirtiéndose en seguidor.

Precisamente por hacer lo contrario a la casi totalidad de las marcas, una enseña puede diferenciarse. He comentado en alguna ocasión que esa diferencia podrá ser tal, si la marca cuenta con las credenciales necesarias para apropiarse de eso concepto diferenciador.

¿Qué pasaría por la mente de un consumidor si a la hora de hacerse seguidor en Facebook de una marca premium (no importa la categoría) no le bastará con hacer clic en "Me gusta"? Imagino que lo primero sería: extrañeza, sorpresa, curiosidad. ¿Y si resulta que la página cuenta con una aplicación que comienza a hacer un estudio de la página de Facebook, del candidato, para valorar conceptos como sus gustos cinematográficos, literarios, las fotos que sube incluso su gramática? 
Si este estudio otorga la puntuación mínima necesaria será admitido, en caso contrario la aplicación le recomendará que "refina su perfil" antes de intentarlo de nuevo.

Esto es lo que ha hecho en EEUU la mostaza Grey Poupon en su página de Facebook, para la que admite solo aquellos seguidores con "buen gusto". Evidentemente el buen gusto es a nivel general, ni si quiera pide que sea consumidor de su producto, solo busca que aquello que les interese sea considerado de buen gusto.

Para poder realizar una campaña de este tipo la marca debe ocupar una posición preferente en la mente de los consumidores o seguidores. No podría intentar algo similar, con éxito, cualquier marca. Por tanto se entiende que se trata de un producto de alta gama o premium dentro de su categoría. Pero aún así, las marcas que pertenecen a este exclusivo segmento buscan cuántos más seguidores mejor, de tal forma que es posible que los que realmente le son fieles no se identifiquen con la mayoría y declinen formar parte de su página de Facebook.

Entiendo que de la misma forma que se puede hacer un filtro para seleccionar seguidores con buen gusto, se podría hacer para lo contrario. O para buscar a aquellos que más viajan o que más leen o cualquier otro concepto.

Ser diferente es no ser igual. Esto lo han entendido en  Grey Poupon.